Hay empresas que han pasado de generación en generación. Incluso, hay algunas que tienen más de 100 años y, en pleno año 2020, son manejadas por algún descendiente de ese hombre que tuvo la visión de construir algo distinto, próspero y rentable.
Las empresas familiares pueden tener éxito o perderlo con el paso de los años. Para mantener una empresa familiar siempre exitosa es importante tener en cuenta varios factores:
-La comunicación. Es básico construir una relación de cualquier índole (laboral, familiar, profesional) sobre la confianza. La transparencia es fundamental para que las bases de esa idea que está naciendo no solo se materialice, sino que se mantenga en el tiempo.
-Innovación. Emprender no es difícil. Y menos en estos momentos, cuando hay tantas herramientas -tecnológicas, de marketing, profesionales, estratégicas- a que se pueden utilizar para beneficio tanto personal como grupal. Lo importante es tener una idea que se distinga de sus similares, bien sea en su concepción o en su desarrollo.
-Formación. No basta con ser el heredero en la línea generacional para encargarse de una empresa familiar. Por eso, no todos los hijos del fundador son quienes se encargan del legado cuando este se retira. Siempre hay uno que sobresale, debido a su formación en el negocio y en cuanto a su manejo. Generalmente, ese líder sucesoral se apoya en el resto de sus familiares para llevar el proyecto a buen puerto.
Mantener el trabajo y las relaciones por separado. No importa el nexo que exista entre el líder y sus iguales. Pueden ser padre-hijo, abuelo-nieto, hermano-hermano, madre-hijo. Lo que importa es que, desde el principio, se marquen límites y se separen los intereses familiares de los empresariales. Esto pasa también por no mezclar los problemas de índole familiar con los que puedan generarse en la organización y viceversa.
- Remunerar lo justo a cada miembro. Si bien en las empresas familiares el manejo del dinero puede resultar complicado, los expertos aconsejan dejar claro desde el principio cómo se le va a pagar a cada miembro. No por tener lazos cercanos hay que dejar de reconocer esfuerzo de cada trabajador involucrado en las mismas.
-Remar en el mismo sentido. La correlación de fuerzas y opiniones sobre el manejo, inversiones, recursos y planes para una empresa familiar es un trabajo en equipo. No hacerlo pone en peligro la estabilidad. Todos los involucrados en el manejo de una organización deben trabajar en pro del mejor desempeño, rentabilidad y consolidación tanto de la empresa familiar, como de sus planes, productos, bienes o servicios.
En Alimentación Balanceada Alibal, compañía presidida por David Somoza Mosquera, se ha erigido por más de cinco décadas una empresa familiar sobre bases sólidas y que apuntan a consolidarlas en su segmento de mercado.
Referencias